En el Día Internacional contra el Cambio Climático, USO defiende avanzar hacia un mundo más sostenible, que proteja y asegure al mismo tiempo el trabajo decente
El 24 de octubre se conmemora en todo el mundo el Día Internacional contra el Cambio Climático. Desde USO estamos comprometidos en la lucha contra el calentamiento global y los efectos del cambio climático. Al mismo tiempo, defendemos procesos de transición justa para los trabajadores.
Como muestra de nuestro compromiso en la lucha contra el cambio climático, USO participa en espacios como la plataforma Alianza por el Clima que cuenta entre sus miembros a grupos ecologistas, otros sindicatos y colectivos de la sociedad civil. Juntos, tratamos de difundir y apoyar soluciones para la transición ecológica, actividades de sensibilización y movilización social.
La pandemia no ha frenado el cambio climático
A pesar de la llegada del COVID-19, éste no ha frenado el cambio climático. El impacto del confinamiento de la población en la emisión de gases de efecto invernadero (las emisiones de carbono se redujeron en un 17%) se ha recuperado en los últimos meses hasta llegar a los niveles previos de pandemia.
Además, estamos muy lejos de cumplir los objetivos del Acuerdo de París para mantener el incremento de la temperatura mundial por debajo de los 2 °C o, mejor aún, de limitarlo a 1,5 °C.
En estos momentos de transformación global de la economía, es necesario que se vuelva más justa y sostenible. Como señala el secretario general de la ONU, António Guterres: “tenemos una opción: seguir como siempre, lo que conduce a más calamidades; o podemos utilizar la recuperación del COVID-19 para brindar una oportunidad real de poner al mundo en un camino sostenible”.
Los planes de recuperación sostenible
El Plan de Recuperación para Europa (Next Generation EU) queda sujeta a que éstos presenten un Plan nacional de recuperación y resiliencia. Este plan nacional debe tener como uno de sus pilares elementales la recuperación basada en la transición justa.
Del mismo modo, el propio Fondo Europeo de Transición Justa -aunque recortado- debe servir con eficacia para la adaptación al cambio climático. Como aspecto positivo, la Eurocámara recientemente ha elevado el objetivo de reducción de emisiones de CO2 para 2030, pasando del 55% al 60%. Otra buena noticia ha sido su condicionalidad a la ratificación del acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur a un cambio de la política ambiental de Brasil. Sin embargo, habrá que esperar a la votación del Consejo Europeo, pues la votación de enmiendas no es vinculante.
A pesar de estos avances, es necesario legislar para el cumplimiento de las empresas en materia de debida diligencia medio ambiental. Y como ejemplo, el reciente informe publicado por Greenpeace que pone en entredicho el porcentaje de reciclaje que realiza Ecoembes, empresa que tiene el monopolio del reciclaje de envases de plástico (la empresa asegura que recicla el 75%, mientras que se ha revelado que es solo el 25%).
USO, con la transición justa
Desde el sindicalismo europeo y desde USO como miembro del mismo, existe un compromiso por la transición ecológica justa. La Federación de Industria del sindicato participa en los planes de transición de las comarcas mineras o térmicas que se están cerrando.
También, recientemente, la CES ha publicado una guía para la adaptación de los puestos de trabajo al cambio climático para avanzar hacia un mundo más sostenible, que proteja y asegure al mismo tiempo el trabajo decente.
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